El Mau Egipcio: una raza de gato única y rara

El Mau Egipcio es un gato único y raro, apreciado por sus cualidades excepcionales y su estrecho vínculo con las personas. El Mau es un gato de tamaño pequeño a mediano, con un pelaje corto a semilargo y moteado. Con solo unos pocos miles de ejemplares en todo el mundo, esta raza se considera rara. Quien adopta uno de estos gatos egipcios suele quedar tan encantado que pronto le sigue un segundo.

Origen e historia del Mau Egipcio

El Mau Egipcio se asocia frecuentemente con raíces egipcias y un pasado milenario. Arqueólogos han encontrado en tumbas del Antiguo Egipto gatos que se asemejan mucho al Mau Egipcio actual. Sin embargo, análisis genéticos demuestran que la raza está estrechamente emparentada con razas occidentales como el Maine Coon, el Korat y el Angora turco.

La historia moderna del Mau comienza en 1953, cuando la princesa Natalie Troubetskoy encontró en Italia un gato perteneciente al embajador de Egipto. Obtuvo una gata de El Cairo llamada Baba y la cruzó con un gato del embajador. Esta línea sentó las bases de la raza moderna. En 1955, los Maus fueron presentados por primera vez en una exposición felina en Roma. Un año después, la princesa Natalie llevó tres Maus a Estados Unidos, donde Baba se convirtió en campeona.

A pesar de su estatus admirado, el Mau sigue siendo una raza rara. Se registran menos de 200 gatitos Mau Egipcio al año.

Apariencia del Mau Egipcio

Esta raza musculosa pero elegante tiene patas traseras más largas, lo que le permite alcanzar velocidades de hasta 58 km/h. Un pliegue suelto de piel en la parte delantera de los muslos le da mayor flexibilidad y velocidad, convirtiéndolo en el gato doméstico más rápido.

El Mau tiene una cabeza mediana con contornos ligeramente redondeados, ojos grandes, redondos y de color verde claro, y orejas medianas. Su pelaje corto y brillante está cubierto de patrones moteados y muestra una característica marca en forma de escarabajo en la frente. Las manchas de este gato egipcio se encuentran solo en las puntas del pelo. Aunque existen otros gatos moteados hermosos, como el Bengala y el Savannah, el Mau Egipcio es la única raza doméstica con un pelaje moteado natural, no creado selectivamente por criadores.

El Mau se presenta en varios colores. Según el estándar de la raza, solo están permitidos los colores plata, humo (smoke) y bronce. Una línea oscura en la espalda resalta su silueta elegante.

El carácter del Mau Egipcio: una raza con mucha personalidad

Los Mau Egipcios son conocidos por su naturaleza afectuosa y leal. Se apegan profundamente a su familia y a veces eligen una persona favorita, pero son devotos de todo el hogar. Su carácter sociable y comunicativo los convierte en excelentes compañeros.

Un Mau busca constantemente tu cercanía. Si cierras una puerta entre tú y él, lo hará saber claramente. Aunque son sociables, los Maus son sutiles y no invasivos. Aun así, siempre saben captar tu atención de manera encantadora cuando la necesitan.

Los Maus Egipcios están entre las razas de gatos más inteligentes. También tienen un fuerte instinto territorial. Son cautelosos con los extraños y prefieren mantener alejados a gatos desconocidos.

Con reflejos ultrarrápidos, los Maus son cazadores natos. Disfrutan persiguiendo juguetes y suelen aprender a traerlos de vuelta. Incluso en interiores, sus instintos siguen agudos: persiguen a los pájaros que pasan volando fuera de la ventana, acompañados de trinos excitados. Este gato amante del agua también disfruta bebiendo y chapoteando en una fuente de agua para gatos.

Cuidados del Mau Egipcio

El pelaje corto de este gato egipcio es fácil de mantener y pierde muy poco pelo. El Mau agradece un cepillado regular. Durante los periodos de muda, puedes darle una pasta anti bolas de pelo como Kat-a-lax para facilitar la eliminación del pelo ingerido y reducir el riesgo de formación de bolas de pelo. Un suplemento de aceite de pescado ayuda a mantener la piel y el pelaje sanos y brillantes.

Como con todos los gatos, es recomendable revisar regularmente las uñas, los ojos y las orejas. Para mantener una buena salud bucal, se recomienda el cepillado de dientes.

Debido a sus orígenes egipcios, los Maus son sensibles al frío. Les encanta buscar lugares cálidos, ya sea un rayo de sol, un radiador o un rincón acogedor junto a la chimenea.

El Mau Egipcio es relativamente propenso a desarrollar cálculos urinarios y cristales. Es importante reconocer los síntomas y reducir el riesgo. En una orina diluida, los cristales se aglutinan con más dificultad. Fomentar la hidratación —por ejemplo, con una fuente para beber— puede ayudar, al igual que mantener un peso saludable, disponer de varias bandejas higiénicas en zonas tranquilas y minimizar el estrés.

El Mau Egipcio no solo tiene una rica historia, sino también una personalidad única que lo diferencia de otras razas. Su lealtad, inteligencia y carácter juguetón lo convierten en el compañero ideal para amantes de los gatos con experiencia. Con una esperanza de vida media de 15 años o más, el Mau es un amigo para toda la vida — un gato elegante y cariñoso que enriquecerá tu hogar con su encanto y personalidad inconfundible.

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